Somos el Movimiento de Familias Igualitarias “Si, Quiero!” y nos encontramos desde nuestras propias diversidades con la decisión de apoyar y defender el proyecto que encabeza la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández.
Tenemos un firme compromiso con el camino iniciado en 2003 por Néstor Kirchner, para que la Argentina sea un país cada vez más inclusivo, más diverso y con mayor justicia social.
La igualdad jurídica para las parejas del mismo sexo, alcanzada con el Matrimonio Igualitario, es el maravilloso resultado de una lucha histórica, encabezada por el movimiento de la diversidad sexual con el apoyo de diversos sectores políticos, y el decisivo aporte de Néstor y Cristina, sin quienes hubiera sido imposible, esta histórica reforma del Código Civil.
Para las/os millones de lesbianas, gays, bisexuales y trans que históricamente hemos sido discriminados/as y excluidos/as de la realidad pública, el matrimonio igualitario ha significado, entre otras cosas, un acto de justicia. Hoy estamos siendo protagonistas de la historia, gracias a que este modelo de crecimiento se ha caracterizado por la ampliación de derechos para vastos grupos sociales.
Es así que la Ley de Matrimonio Igualitario, nos trasciende a nosotras/os, a nuestras familias, a nuestros amigos y a la sociedad argentina toda, porque provoca un profundo cambio de paradigma, que se replica en otros países del mundo, colocándonos a la vanguardia en el tema de los Derechos Humanos.
Somos conscientes que aún resta profundizar estas políticas para seguir creciendo con una distribución más equitativa de la riqueza que generamos entre todos/as, recuperando la educación, la ciencia, la cultura y la alegría.
La diversidad sexual también tiene temas pendientes en su agenda: el derecho a la identidad para las personas trans e intersex, el reconocimiento igualitario de los hijos e hijas nacidos antes de la Ley de Matrimonio y la ejecución de políticas públicas especificas para nuestra comunidad que garanticen una verdadera igualdad de oportunidades y trato.
Sabemos que no es lo mismo esperar, que haber recuperado la esperanza.
Por eso estamos convencidos/as de que la única posibilidad de seguir avanzando es fortaleciendo la continuidad del proyecto que encabeza Cristina.
Ni un paso atrás!
Somos muchas y muchos los que volvemos a decir: ¡Sí, quiero!
Cristina 2011, por una Argentina cada vez más igualitaria.
